Conóceme un poco más
Formación
Mis experiencias de vida me llevaron a estudiar el grado de Educación Social, especializándome en atención a la infancia y a la adolescencia. Ya entonces confiaba en la educación, en el sentido más amplio de la palabra, como la base de una sociedad sana.
Amplié mi formación universitaria con el Máster en Mediación familiar y comunitaria y desde entonces no he parado de formarme atendiendo mis ganas de aprender, sobre todo en el ámbito de las relaciones tanto con uno mismo, como con las personas que nos rodean.
Así, me he formado en Inteligencia Emocional, Programación Neurolingüística (PNL) y soy certificada en Disciplina Positiva en familia por la Positive Discipline Association.
Y para darle sentido a toda esta formación, la vida me presentó el Máster en Coaching Estructural, donde además de certificarme como coach profesional por la OCCI (Organismo Internacional Certificador de Coaches Profesionales), el coaching le dio a mi vida un nuevo enfoque de luz, coherencia y equilibrio, y es desde aquí desde donde quiero acompañarte.
Carrera profesional
Mi trayectoria profesional comienza en el sector del comercio.
Empiezo compaginando mis estudios con trabajos en el maravilloso mundo de “de cara al público”. Un mundo dónde empiezo a ser consciente de cómo nos relacionamos con nuestro entorno y también, de cómo inevitablemente las relaciones sostienen la mayor parte de nuestra vida y nuestro bienestar y salud emocional.
Al mismo tiempo, realizo voluntariados con menores en situación de vulnerabilidad. Es algo que me llena, me reconforta y da sentido a mi camino y a lo que en 2015 empezaré a dedicarme de forma profesional como Educadora Social.
Hasta 2020 que empezó el proyecto más importante de mi vida, la maternidad, trabajé como educadora referente en un CRAE (Centro Residencial de Acción Educativa) ¡y aún me emociono al pensar en lo maravilloso que puede llegar a ser el ser humano y la importancia en la vida de tener la oportunidad de construir relaciones respetuosas y positivas!
La maternidad fue mi mayor fuente de inspiración y el impulso definitivo para dedicarme a lo que más me apasiona: la educación y las relaciones humanas poniendo foco en el punto de partida, la familia.
En mayo de 2022 puse en marcha este proyecto que os presento como educadora familiar y en poco tiempo me di cuenta que la necesidad de atender a la infancia y la adolescencia desde el núcleo familiar es una necesidad real muy presente en nuestra sociedad.
He encontrado por el camino grandes personas y profesionales con las que comparto vocación y proyectos de acompañamiento familiar y atención infantojuvenil.
Acompaño y asesoro a familias, niñxs y adolescentes con situaciones de vulnerabilidad; familias que se enfrentan a diagnósticos de TEA, TDAH u otros transtornos de la conducta; o familias que se encuentran en una etapa de la vida en la que buscan un cambio y mejorar su calidad de vida.